Rafael Uribe Noguera, presunto asesino de la menor de edad Yuliana Samboní, estaría buscando un preacuerdo con la Fiscalía. Este hombre aceptaría cargos pero pediría al parecer no implicar a su familia.
La aceptación de cargos por feminicidio de una menor de edad le daría por lo menos 40 años de cárcel. Uribe, que también fue acusado de secuestro, tortura y abuso sexual de la niña Samboní, no tendría que responder por los dos primeros si proporciona los detalles de lo ocurrido.
Otro de los beneficios sería el de no incriminar a sus dos hermanos Francisco y Catalina, en los hechos antes mencionados. Esa sería la petición de los abogados de Uribe, aunque la Fiscalía confirmó este lunes que todavía no ha llegado ninguna solicitud en ese sentido.
Cabe señalar, que Catalina Uribe asistió ante la Fiscalía 121 de la Unidad de Vida para una diligencia de interrogatorio, donde explicó la supuesta alteración de la escena del crimen de la niña de siete años.
Uribe entró a la diligencia luego de que su hermano saliera del encuentro con la fiscal que duró cerca de siete horas. A su salida, el abogado alcanzó a ser golpeado por las personas que estaban en los Juzgados de Paloquemao, y que protestaban por la muerte de la menor.
Franciso Uribe, quien el otro hermano, lamentó los hechos sucedidos y pidió perdón por el asesinato que habría cometido su hermano: “Lamentamos profundamente la muerte de Yuliana. Estoy completamente compungido por lo que pasó, de verdad y pedimos perdón por mi hermano”.
El jurista exintegrante de la firma de abogados Brigard & Urrutia y su hermana asisten a interrogatorio luego de que el ente investigador determinará que aparentemente el cadáver de la niña fue escondido en un baño del apartamento de Rafael Noguera, sin embargo, posteriormente dicho cuerpo fue puesto al lado de un jacuzzi, y habría sido lavado con el fin de quitar los rastros de sangre y fluidos. Igualmente, las autoridades detectaron que los restos fueron regados con aceite de cocina.
Lo que alerta a la Fiscalía es que presuntamente los familiares habrían conocido lo que paso en el apartamento de Uribe Noguera, y no habrían alertado oportunamente a las autoridades, sino hasta cinco horas después ocurrido el hecho.
Además, también se indaga si hubo estrategia dilatoria al internar al arquitecto en la Clínica Vascular Navarra. Según la Fiscalía, Rafael Uribe habría consumido una alta cantidad de drogas y alcohol, al parecer, tras cometer el asesinato con el fin de ser recluido en dicho centro médico.