Una de las pruebas aportadas por la Fiscalía a la juez como sustento de la serie de delitos cometidos por el alcalde de Barbosa, Antioquia, Edison García Restrepo y varios de sus funcionarios de primer nivel, fue la interceptación de llamadas en las que se pactan ilícitos.
Según, Raúl González Flechas, director seccional de Fiscalías de Medellín, en una de las conversaciones, el mandatario ordena robar el computador de una mujer cercana a él. En el equipo, asegura, había información que podía ser relevante para la investigación.
En los audios, además, sugiere el fiscal, se escucha cómo García Restrepo da la orden de contratar delincuentes para que “estando la señora en el Centro de Medellín le fuera hurtado el computador y se lo devolvieran para tener la información bajo su custodia”.
Otra de las grabaciones contiene una conversación del alcalde con una mujer a quién le pide que le quite la batería al computador (el mismo que habrían recuperado delincuentes en un atraco ordenado por él) para evitar ser rastreado por los investigadores.
El alcalde de Barbosa, Edison García Restrepo, fue capturado el pasado 18 de octubre en un operativo de la Fiscalía en varios sitios, entre ellos una finca del municipio de Copacabana.
Estos son los audios:
Este lunes, la juez de Control de Garantías, que asumió el caso, impuso medida de aseguramiento carcelario en contra del alcalde, de cuatro de sus secretarios de despacho y un contratista; además, indicó González Flechas, impuso tres medidas domiciliarias, para la primera dama, por su estado de embarazo, para otro contratista, y uno de los secretarios por ser padre cabeza de familia.
Todos están implicados en la celebración indebida de contratos, que suman un total de 7 delitos. Se les señala de realizar contratos fraudulentos que incluyeron obras de acueducto y alcantarillado, y del Programa de Alimentación Escolar, PAE.
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Las corporaciones implicadas en la red de corrupción son Manos Creativas, Corpoideas y Construir Ideas. La Fiscalía le atribuye a esta última la celebración de un contrato por valor de más de 2.296 millones de pesos, la tajada mayor. “Una vez sacado entre el 7 y el 10% del contratista, los sobrecostos se los repartían”, dijo la fiscal del caso.
“Dentro de la investigación se logró establecer cómo la red de empresas falsas adulteraban facturas de cobros. Una vez salía el cheque a favor de los contratistas, estos debían entregar a miembros de la Administración, en efectivo, los porcentajes a los que eran obligados”, apuntó el director de Fiscalías Medellín.
Agregó el funcionario, que “tenemos registrada a la esposa del alcalde recibiendo el dinero en centros comerciales de Medellín. Le hicimos seguimiento desde la salida del banco hasta la entrega, y después posesión por parte de ella”.
