Con la meta de hacer pruebas preoperativas en el segundo semestre de 2017, los trabajos en la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales de Bello Aguas Claras van a toda marcha.
Según David Cortés, ingeniero de la Dirección del proyecto de Bello de EPM, las obras registran un avance del 78 por ciento.
Informó que terminaron los trabajos del interceptor norte, un túnel de 7,7 kilómetros de longitud que va desde la zona de Moravia, en Medellín, y que conducirá las aguas residuales hasta la Planta.
Cortés añadió que, en la actualidad, están en el montaje de todos los equipos que se diseñaron especialmente para este complejo, los cuales fueron probados en las fábricas de origen.
Las claves de la Planta
La Planta de Bello es la segundo que entrará en operación en el Valle de Aburrá y es tres veces más grande en infraestructura y capacidad de tratamiento que la de San Fernando, en Itagüí, que funciona desde el año 2000.
San Fernando hace un tratamiento de 1,8 metros cúbicos por segundo (1.800 botellas de agua cada segundo) y Bello tendrá capacidad de tratar 5.000 litros por segundo.
San Fernando le extrae 90 toneladas de lodo diarias (materia orgánica) al río Medellín y cuando opere la Planta de Bello esta liberará al afluente de 300 toneladas diarias de materia orgánica.
El ingeniero David Cortés señaló que, hoy, se considera un río descontaminado cuando registra niveles de oxígeno por encima de 5 miligramos por litro, que se alcanzarán cuando opere la Planta de Bello. En el tramo del río saneado, ya se han logrado obtener 5 miligramos de oxígeno por litro tratado.
Cortés anotó que en el interior del complejo de Bello también se avanza en la planta de secado de biosólidos, que no sólo producirá abono orgánico de primera calidad sino también 30 % de la energía necesaria para la operación de la Planta de Bello.
Volver al río
El colectivo La Ciudad Verde valora las labores de mejoramiento del entorno urbano junto al río Medellín, como el proyecto Parques del Río, y la construcción de la planta de tratamiento.
Santiago Ortega, integrante de La Ciudad Verde, señaló que el río ha sido tremendamente olvidado y que es el momento de volver a recuperarlo para que en sus alrededores se desarrollen viviendas y todo tipo de servicios para el ciudadano.
“La Planta es importante porque le devuelve al río condiciones de atractivo natural y que no sea nauseabundo”, indicó Ortega.
Resaltó que el Plan de Ordenamiento Territorial pone al río Medellín como eje y esa es la apuesta de ciudad.
En el nacimiento
Esa es la expectativa que plantea el alcalde de Caldas, Carlos Eduardo Durán, municipio donde nace el río Medellín.
Según el mandatario, busca, en asocio con Corantioquia, declarar una zona de protección ambiental. Ha señalado que la zona de La Clara y el nacimiento del río están bien cuidados, solo que los fines de semana y en puentes el resto de habitantes del Valle de Aburrá los dejan en precarias condiciones.
Durán se considera ambientalista y dijo que trabajará por la recuperación. Advirtió que el río Medellín se niega a morir y lo estaban matando con la cantidad de escombreras en sus riberas, sobre todo en la jurisdicción de Caldas.
En su administración se han cerrado, entre legítimos e ilegítimos, casi 80 puntos de disposición de escombros y de tierra.
Ruta del saneamiento
En las labores de saneamiento del río Medellín, EPM suma hoy una inversión de 447 millones de dólares, solo en la puesta en marcha de San Fernando y en la construcción de la Planta de Bello.
EPM ha señalado que con la Planta de Bello el río Medellín quedará saneado en un 95 por ciento y que el 5 por ciento restante se tratará con las futuras plantas de tipo preliminar que se construirán en Girardota y Barbosa.
“Vamos por etapas. Terminamos esta (la de Bello) y luego se planea qué tipo de plantas serán las del norte, si son primarias o secundarias, dependiendo de la necesidad”, expuso el ingeniero Cortés.
Si bien hay plantas con funciones similares en otras ciudades latinoamericanas, la de Bello será de última tecnología y con ella Medellín se pone a la vanguardia en los sistemas de descontaminación de ríos.
347
millones de dólares, monto con el que fue adjudicada la construcción de la Planta de Aguas Residuales de Bello.
100
millones de dólares fue el valor de la construcción de la planta de San Fernando, ubicada en Itagüí.
3
veces más grande en infraestructura y capacidad es la de Bello en relación con la de San Fernando.