El proyecto de intervención y repotenciación de la estructura del Parque Biblioteca España, que realiza el consorcio Obras Medellín, no ha podido cumplir con el cronograma de avances; los trabajos, que iniciaron el 15 de octubre de 2015, con un plazo de ejecución de 16 meses—deberían terminar el 15 de febrero de 2017— no estarán listos.
La razón fue un otrosí que se le realizó al contrato de obra para incluir un estudio de vulnerabilidad sísmica y diseños de intervención o repotenciación a la estructura, el cual inició el pasado mes de noviembre y todavía está en ejecución. Sin las conclusiones de este estudio, no se puede avanzar en la reparación de los edificios, porque no hay certeza si las estructuras metálica y de concreto actuales son adecuadas.
Si el estudio concluye que lo mejor es desmontar las estructuras actuales, el costo de la reparación —o ya en este caso de la reconstrucción— del Parque Biblioteca España, excedería el valor inicial de lo que costó hacerla —15.000 millones de pesos en 2007—, debido a que esta intervención fue de 9.746 millones de pesos, con una auditoría de 969 millones de pesos; recursos que no alcanzarían para volver a levantar una de las obras icónicas de la alcaldía de Sergio Fajardo y el símbolo de resiliencia del barrio Santo Domingo Savio, comuna 1 de Medellín.
La fachada, otro problema
“En cuanto a la piedra (de la fachada), esta no se puede reutilizar; una de las posibles causas de este desastre, fue la manera en la que se ancló en la estructura principal. En algún momento, alguien decidió que este material debía anclarse perforando cada pieza para poner un tornillo, eso convirtió a la estructura en un colador. Es decir, cada piedra está rota y no tiene ningún sentido reinstalar un revestimiento de un sistema que debe ser impermeable pero que tiene perforaciones cada 30 centímetros”, explicó el ingeniero estructural Josef Farbiarz, director del Centro de Proyectos e Investigaciones Sísmicas (Cpis) de la Universidad Nacional.
El experto también aseguró que las dimensiones de las piedras eran desiguales, lo que causaba más problemas para la fachada.
“En defensa del patrimonio y con la premisa de evitar desechar material lo menos posible; nuestra conclusión, independientemente de los costos, es que esta piedra en esas condiciones, no sirve para reutilizarla. Le sugerimos a la Administración Municipal que contemplaran la posibilidad de cambiar el revestimiento, usando granito u otro material, pero nos contestaron que no, que la biblioteca debía quedar con la misma arquitectura”, enfatizó Farbiarz.
Es decir, para rehacer la fachada, toca utilizar el mismo tipo de piedra, ya que hay una cláusula de derechos de autor sobre los diseños —realizados por el arquitecto Giancarlo Mazzanti— que exigen que se debe utilizar ese material para revestir dicha estructura.
Una comisión accidental del Concejo de Medellín, coordinada por el concejal liberal Bernardo Alejandro Guerra, le está haciendo seguimiento al estado real de los trabajos de reparación y repotenciación.
