A las 9 de la mañana de este jueves, 17 de las 18 estaciones de monitoreo de calidad del aire de tipo poblacional con las que cuenta el Valle de Aburrá estaban en color naranja. Es decir que registran niveles de material particulado (PM) 2.5 en cantidades nocivas para los habitantes del área metropolitana, en especial para poblaciones vulnerables como adultos mayores y niños.
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Además, las dos estaciones de tipo de tráfico, ubicadas en la estación La Estrella del Metro y en el Museo de Antioquia, están en rojo: los registros indican una afectación directa a todos los residentes del territorio.
Las estaciones de representación poblacional están ubicadas en zonas residenciales del Valle de Aburrá y por eso son las que tienen en cuenta en el protocolo para declarar alertas ambientales.
En ellas se mide la concentración de partículas PM 2.5, que por su tamaño pueden entrar a los pulmones e incluso al cerebro. El resultado se presenta en microgramos por cada metro cúbico de aire. Hasta 35.5 microgramos la calidad del aire es moderada (ICA amarillo), desde 35.5 hasta 55.5 el aire es dañino para grupos sensibles (ICA naranja) y a partir de 55.5 es malo para la población en general (ICA rojo).