El temor que produjo en Segovia el reciente homicidio de Fernando Augusto Silva Henao, líder de la mina Providencia, operada por Mineros Asociados del Nordeste (Masora), paralizó las actividades este viernes de por lo menos 1600 trabajadores en tres de las principales minas del municipio.
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Muchos, se presentaron a trabajar como de costumbre pero expresaron el temor y la zozobra que ronda entre las familias por la seguidilla de hechos violentos que en las últimas tres semanas han dejado otro minero muerto y dos más heridos, y que provienen de acuerdo con voceros de la empresa del no pago de extorsión a Los Urabeños.
Las tres minas que suspendieron actividades son propiedad de la multinacional canadiense Gran Colombia Gold quien le compró los títulos en 2010 a la Frontino Gold Mines.
En la tarde de este viernes se cumplieron las exequias de Fernando Silva, padre de Wendy Fernanda y Julián.
