El fervor que la fanaticada verde tenía contenido, desde mediados de mayo, en su última presentación del semestre pasado, salió a flote ayer en el Parque Estadio Sur.
A la tribuna regresaron los trapos, los estribillos y el apoyo irrestricto al equipo de hombres y mujeres con rostros ansiosos del espectáculo que hace rato esperan del rey de copas colombiano.
Nacional le ganó (2-0) a Rionegro por la Copa Postobón y, al final, hubo alegría, pero no fue plena. El plantel no convenció del todo, aunque, a manera de consuelo, los hinchas, mientras abandonaban el escenario, señalaban que este apenas es el comienzo y "en la cancha no estaban todas las figuras".
Los dirigidos por Jimmy Arango jugaron todo el segundo tiempo frente a un rival con nueve hombres tras la expulsión de Sebastián Puerta y Joan Muñoz en el cierre de la etapa inicial, por protestar decisiones arbitrales. Y a pesar de esa ventaja se complicaron y de no ser por Pezzuti, quien le detuvo una pena máxima a Édison Hernández, cuando el marcador estaba 1-0, otro hubiese sido el desenlace.
Los que asistieron al compromiso en la tarde soleada llegaron atraídos por Pezzuti, Stalin Motta, Marcos Mondaini y los debutantes Jaime Córdoba y Dorlan Pabón, pero terminaron aplaudiendo a Camilo García, autor de los dos goles (33' y 77').
El muchacho, de 22 años de edad, habitante del barrio El Pedregal y con poca historia en el profesionalismo, le salvó la tarde a Nacional.
Su figura, de 1,70 metros y 67 kilos de peso, salió aplaudida del Polideportivo Sur, luego de exhibir su olfato goleador y capacidad como volante creativo. El técnico Arango le ordenó jugar al comienzo como mediapunta y cumplió. Luego lo retrasó a su posición original de 10, la que más le gusta, y el joven, que llegó hace dos años y medio al club, también acertó.
El otrora jugador de los clubes aficionados Ferroválvulas y Barcelona, recomendado por Álvaro Restrepo, cumplió con creces: "siento una alegría grande de estar en el primer equipo, gracias a la confianza de la afición y del cuerpo técnico. Lo que más me gustó de Nacional fue la tranquilidad y la paciencia, nunca se desesperó ante un rival que se para bien. Por fortuna, Gastón (Pezzuti) atajó el penalti y luego aceleramos para aumentar la cuenta".
Córdoba y Pabón dieron pinceladas de buen fútbol en el conjunto que, además de los ya mencionados, utilizó a Víctor Giraldo, Camilo Pérez, Stefen Barrientos, Jair Iglesias, Marlon Piedrahíta, Daniel Santa, Cristian Correa y Víctor Ibarbo. Mientras, Rionegro, que protestó el arbitraje de Óscar Gómez, perdió la brújula con las dos expulsiones.
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